El mundo… ¡ay el mundo cómo nos ha sorprendido el 2020! “El mundo cambió”, dicen todos, pero solo unos muy pocos pueden explicar el porqué.
La pandemia nos dejó, y está dejando, infinitas reflexiones, ya que no solo ha provocado cambios en la salud y comportamiento de las personas, sino que además el planeta, y su medioambiente, también se ha visto afectado.
Muchas cosas se han dicho respecto a este ámbito, desde que los animales salieron a tomar aire al mundo, hasta el avistamiento de medusas, cangrejos y pulpos en las aguas de Venecia. Lo cierto es que nada es “tan cierto”, muchas de las noticias que circulan son falsas, y muchas de ellas han generado pánico en la gente, que presiente que un animal feroz podría visitar el baño de sus casas. Aquí es donde la Ingeniería Ambiental hace su aparición.
La ingeniería ambiental es una disciplina que lucha por conservar y preservar los recursos naturales para garantizar una mejor calidad de vida, tanto para nosotros como para las generaciones venideras, y como bien sabemos, los recursos se van acabando, por eso la UPV es selectiva y perfeccionista con el ingeniero ambiental que egresa de sus aulas, y los prepara con una alta capacidad de innovación para el análisis de los procesos ambientales y de la industria agroalimentaria. De hecho, esta carrera se imparte en la Facultad de Ciencias Agropecuarias, ya que en ella se gestiona de manera multidisciplinaria, el uso y preservación sustentable del medioambiente y el entorno natural. Un ingeniero ambiental tiene una gran tarea en sus manos.
Esta carrera es considerada por muchas personas como una profesión de proyecciones globales, ya que de ella depende encontrar soluciones a las crisis ecológicas que estamos viviendo, y cómo estas interactúan en este famoso “nuevo escenario”.
Respecto a lo anterior, ¿ha bajado el nivel de emisiones de CO2 desde que comenzó la crisis sanitaria? La respuesta es sí (ver información). Considerando que el CO2 es el principal agente en el cambio climático, pareciera ser fácil deducir que esta es una muy buena noticia para el planeta. Al vernos limitados con la movilidad, hemos prescindido (un poco) el consumo de petróleo y carbón, entre otros. Los gases de efecto invernadero se han visto reducidos al disminuir los vuelos, embarques, etc.
¿Podemos entonces esperar algo positivo del Covid-19 para el planeta a futuro? De ninguna manera… PERO… un buen ingeniero ambiental no descarta ninguna de las cartas que estén en la mesa. Es OBVIO que el coronavirus es absolutamente perjudicial, y mientras más esté con nosotros, peor serán sus efectos. Sin embargo, ha creado la instancia para buscar soluciones rápidas, pero certeras, para que el mundo no dependa de falsas sensaciones de bienestar.
Si quieres estudiar Ingeniería Ambiental, prepárate, porque te esperan los 10 semestres más intensos de tu vida. Geología, Química, Biotecnología, Termodinámica, Microbiología, entre otros ítems de estudio, serán tus compañeros en tu gran aventura.
Los frutos de estudiar esta hermosa profesión se dan en el primer año de haber egresado. Un ingeniero ambiental de la UPV es siempre bien cotizado en sectores públicos y privados, y sus capacidades de formar equipos multidisciplinarios en áreas silvoagropecuarias, de extracción mineral y en fuentes emisoras, a nivel empresarial como gubernamental, le permiten muchas alternativas de empleabilidad. Centros de Investigación y docencia en instituciones de educación superior son algunas de ellas.
Puedes elegir estudiar en horario diurno y vespertino, y con acceso a clases remotas para tu comodidad. Para más información simplemente haz clic en este enlace y todas tus dudas serán respondidas. Si sientes la vocación, es porque ya tienes el 90 % de tus interrogantes resueltas.
El 2020 no fue fácil para nadie, pero con el comienzo de este 2021 también “amanecen” esperanzas de un mundo mejor. Un ingeniero ambiental tiene mucho trabajo que hacer, y nosotros tenemos mucho apoyo que brindarte.
